¿Sabías que una conducción eficiente de tu vehículo te permite reducir el consumo de hasta un 25 % de combustible evitando emisiones de CO2?
La sostenibilidad del medioambiente no sólo depende de acciones como el reciclaje y la reutilización de materiales. Como profesionales de la conducción también es posible contribuir para rebajar los niveles de contaminación y el ahorro de energía.
Algunos eco-consejos:
- Evitar los acelerones y los frenazos en situaciones que no sea necesario, por ejemplo cuando percibimos el cambio de luz en un semáforo. Por el contrario, se recomienda realizar un cambio de marcha progresivo para que el coche se detenga o avance por su propia inercia y adecuadamente. En los acelerones y los frenazos aumenta el consumo de combustible.
- Mantener una distancia adecuada en relación con otros coches, de modo que la circulación sea segura y se mantenga una velocidad regular.
- Levantar el pie del acelerador y aprovechar la inercia del coche a la hora de bajar pendientes. No se debe dejar el cambio de marchas en punto muerto: es peligroso y consume más combustible.
- En las curvas lo mejor no es frenar, como lo hacen muchos conductores, sino anticiparnos a la misma de modo que el vehículo pierda velocidad por sí mismo y vayamos corrigiendo el camino, si cabe, con el freno. De este modo, en el momento de abordar la curva tendremos la velocidad idónea.
- Cuando estemos ante una situación de tráfico intenso, por ejemplo un atasco o una caravana, se sebe rodar en la marcha más larga posible para evitar acelerones o frenazos de los que hemos hablado previamente.
- Comprobar la presión de los neumáticos. Un 3% del consumo del coche depende de la presión de los neumáticos, así que es importante que estos circulen siempre con la presión adecuada.
Recuerda que…
¡Tu forma de conducir te puede ayudar a ahorrar
y a cuidar del medio ambiente!
